La forma más habitual que tenemos de colaboración con empresas es la donación de productos, ya sean excedentes, productos promocionales o donación a través de programas de responsabilidad social corporativa.

También se puede colaborar con acciones de voluntariado corporativo. 

Además, se pueden hacer aportaciones económicas y de otros tipos de productos como bienes de equipo, etc.

Todas las donaciones disfrutan de bonificaciones fiscales.